Hoy en día disfrutamos de una conexión a internet en multitud de lugares: en casa, en el trabajo, en cafeterías, aeropuertos, etc. Y empezamos a estar acostumbrados a todos los servicios y aplicaciones que estar conectados nos supone en nuestra vida diaria. Dotar de conectividad a los vehículos es un paso natural que nos brindará numerosas ventajas. Desde llevar las aplicaciones más tradicionales –como la navegación web, la consulta del correo electrónico o la descarga de contenido multimedia– al asiento de nuestro coche, hasta facilitar que gran cantidad de los dispositivos que a día de hoy están instalados en nuestros coches –ordenadores de abordo,reproductores de música y vídeo, sensores, etc.– puedan utilizar internet para estar siempre actualizados e informar de posibles problemas –concertando una cita con el taller de forma automática si fuera necesario–.
Dotar a nuestros vehículos de capacidades de comunicación nos proporcionará ventajas adicionales. Uno de los objetivos es conseguir mejorar la seguridad vial, una de las mayores causas de mortalidad en las sociedades económicamente avanzadas. La Unión Europea, mediante el programa eSafety, pretende reducir el número de bajas en carretera un 50% en el año 2010, y para ello está impulsando el uso de nuevas tecnologías como medio para prevenir los accidentes.
Se está trabajando en el diseño y despliegue de sistemas que doten de capacidades de comunicación a los vehículos y que empleen de manera eficiente dichas capacidades para mejorar la seguridad vial. Esto permitirá a los vehículos intercambiar información diversa entre sí y con otros sistemas instalados en las carreteras, de forma que se pueda informar sobre el estado de las vías y de posibles incidentes que pudieran ocurrir. Será posible advertir a los vehículos cercanos de una mala maniobra o incluso de un accidente inevitable – permitiendo a los diferentes sistemas de seguridad instalados en el coche configurarse de la manera más adecuada para minimizar el daño –.
Además de la seguridad, el despliegue y uso de comunicaciones entre vehículos y con Internet mejorará la eficacia de la utilización de las infraestructuras viales, por ejemplo, avisando en tiempo real de atascos en una vía a aquéllos que estén próximos a incorporarse a la misma, o adecuando, mediante comunicaciones con los sistemas de señalización vial – como los semáforos –, la velocidad del vehículo, de forma que se minimice el tiempo que éste está detenido.
En el Grupo de Redes y Servicios de Comunicaciones (Netcom) de la Carlos III, dirigido por el catedrático Arturo Azcorra, trabajamos en proyectos, tanto a nivel nacional – proyecto Poseidon – como europeo –colaboración con el instituto de investigación IMDEA Networks–, y colaboramos con varias empresas del sector vehicular en Europa, diseñando sistemas que permitan comunicar conjuntos de dispositivos desplegados en vehículos con otros vehículos y con Internet.
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